Conocido popularmente como Castillo de Luna, es un edificio defensivo cristiano construido a mediados del siglo XIV. Su origen lo situamos en el contexto de la donación del lugar de Mairena del Alcor por el rey Alfonso XI a Pedro Ponce de León en 1342. En 1902 fue comprado por el pintor anglo-francés Jorge Bonsor quien acondicionó la fortaleza para acoger su residencia-museo en la que destaca la riqueza de sus colecciones arqueológicas.
Durante los últimos 20 años el Ayuntamiento ha llevado a cabo numerosas obras de rehabilitación y restitución de la fortaleza y la residencia museo. El olivar que lo rodea se ha transformado en un parque urbano dotado con un aula de la naturaleza llamada Bioaula y un arqueódromo que reproduce una tumba de corredor de la cercana necrópolis dolménica de Gandul-Bencarrón.
Con el objetivo de crear un espacio de socialización del conocimiento, en el castillo se llevan a cabo numerosas acciones de divulgación y turismo científico. A través de talleres y conferencias se dan a conocer los fondos de la colección, la historia de la fortaleza y su entorno natural, con especial énfasis en la colonia de cernícalos primilla, una de las más numerosas y mejor conservada en edificio urbano de Europa.